Cada 9 de agosto se celebra el Día Internacional de los Pueblos Indígenas. En México, donde alrededor de 6.5 por ciento de la población es hablante de una lengua indígena, no hay mucho que festejar, pues las comunidades siguen teniendo condiciones de vida más desfavorables respecto al resto de la población.

Según la Encuesta Intercensal 2015 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el país habitan alrededor de 7 millones 383 mil indígenas, y de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) 2015, siete de cada 10 personas hablantes de lengua indígena se encuentran en situación de pobreza, lo que deriva en múltiples problemáticas a las que este grupo se enfrenta de forma cotidiana.

Datos de la encuesta antes referida indican que 15 por ciento de la población indígena no tiene acceso a servicios de salud pública y 11.7 por ciento se ha visto forzado a migrar en búsqueda de mejores condiciones de vida.

Además, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la población analfabeta entre las comunidades indígenas alcanza 23 por ciento, mientras que en el resto de la población se mantiene en 4.2 por ciento.

En tanto, la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) reporta que 14.3 por ciento de las viviendas de personas indígenas no cuenta con agua entubada, lo que deriva en una alta morbilidad por enfermedades gastrointestinales, dermatológicas y respiratorias.

A nivel local

Jalisco ocupa el lugar 26 entre las entidades del país respecto a porcentaje de población hablante de lenguas indígenas, siendo el huichol, el náhuatl y el purépecha las más utilizadas.

En tanto, según el Consejo Estatal de Población, los municipios que presentan una mayor tasa de habitantes de grupos originarios son: Mezquitic, con 73 por ciento; Bolaños, con 59 por ciento, y Huejuquilla el Alto, con 5 por ciento.

Aunado a las problemáticas nacionales expuestas anteriormente, algunos de los principales problemas a los que se enfrentan las poblaciones originarias de Jalisco son el rezago educativo y la falta de infraestructura básica.

Según datos de 2014 de la Secretaría de Desarrollo e Integración Social (Sedis), 30.49 por ciento de la población indígena de Jalisco tiene rezago educativo, es decir, población mayor de 15 años que no cuenta con la educación básica obligatoria correspondiente a su edad o menores de esa edad que no asisten a la escuela.

Respecto a los recursos invertidos en infraestructura básica para las zona indígenas (se incluyen obras de comunicación terrestre, electrificación, agua potable y saneamiento), van en picada desde 2013 a la fecha. Ese año cerró con una inversión en ese rubro de 166 millones de pesos, a 2014 ya había caído a 142 millones; para 2015 alcanzó casi 100 millones de pesos y el año pasado cerró con el ejercicio de 57 millones de pesos.

Exigen acatar sentencias

La bancada de Movimiento Ciudadano en la Cámara de Diputados, coordinada por Clemente Castañeda Hoeflich, presentó un punto de acuerdo en el que pide a la Secretaría de Gobernación que intervenga para que se acaten las sentencias emitidas por tribunales agrarios a favor de la comunidad wixárika y así le sean restituidas sus tierras. Esperan que sea votado el martes en sesión de la Comisión Permanente.

A la Fiscalía General del Estado le piden que se investigue y aclare el asesinato de los hermanos Miguel y Agustín Vázquez Torres, líderes huicholes.

Macedonio Tamez Guajardo, diputado de Movimiento Ciudadano por Jalisco, aseguró que es “cuestión de derechos fundamentales, de seguridad y de justicia”.

Los legisladores naranjas aseguran que esa comunidad ha sido explotada y vive desprotegida por las omisiones de los gobiernos de Jalisco y Nayarit.

30.49 por ciento de la población indígena de Jalisco tiene rezago educativo, según datos de 2014 de la Sedis.