En México se venden 340 millones de paquetes de cigarros de contrabando cada año
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), reveló que en México se venden alrededor de 340 millones de paquetes de cigarro de contrabando cada año -cerca de 29 millones cada mes-, y es la frontera con Belice uno de los puntos donde más producto adulterado e ilegal ingresa.
Frente a ello, la secretaria de la Comisión de Salud en la Cámara de Diputados, Rosa Alba Ramírez Nachis, aseguró que la comercialización ilegal de tabaco “representa un grave riesgo a la salud pública, ya que muchas veces la mayoría de estos cigarrillos no cuenta con los controles sanitarios necesarios y tiene contenido adulterado”.
En ese contenido, añadió la legisladora federal de Movimiento Ciudadano, se ha encontrado “desde material para elaborar alfombras hasta restos óseos no identificados”.
Esto, afirmó, se vuelve mucho más preocupante cuando productos de estas características entran en el mercado informal; “Muchos jóvenes compran tabaco y no hay control en su adquisición.
“Niños pequeños van a las tiendas por cigarros sueltos, pero peor es ver fuera de estaciones del metro o tianguis puestos en los que encuentras una variedad de cigarrillos de marcas supuestamente extranjeras, que no tienen garantía de calidad y pueden dañar gravemente la salud de los consumidores”, agregó.
Recordó que en 2013 la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN), registró que el contrabando de cigarros representa el 17 por ciento del total de las ventas de estos productos en el país.
En tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha señalado que esta actividad no sólo daña la economía de una nación, sino que genera también daños en la salud y engaña a los consumidores al no contar con advertencias sanitarias y, al venderse más barato, provoca que aumente el número de menores que lo consumen.
El primer paso para combatirlo, señaló Ramírez Nachis, es establecer un antecedente en la Ley General para el Control del Tabaco, para facultar a la Secretaría de Salud para coordinarse con dependencias y organismos públicos y fortalecer la revisión de los controles sanitarios, así como combatir la venta ilegal del producto.
El objetivo, no obstante, es no parar ahí y buscar que se tipifique como delito el contrabando y comercio ilegal de productos de tabaco en el Código Penal Federal, añadió en entrevista.
“La solución no es incrementar prohibiciones o establecer más medidas sin que antes se cumplan las ya establecidas; nuestra tarea desde el Legislativo es concientizar a la población y facilitar que se haga lo que tenga que hacer, para cada uno de los involucrados; desde autoridades hasta consumidores y población en general”, concluyó.