Diputados Ciudadanos presentan iniciativa para cancelar bonos extraordinarios en la Cámara de Diputados
El Diputado Ciudadano Jorge Álvarez Máynez presentó una iniciativa de reformas a la Ley Orgánica del Congreso para prohibir la asignación de subvenciones especiales, extraordinarias o adicionales a los Grupos Parlamentarios de la Cámara de Diputados, aún en casos excepcionales. La iniciativa propone que la cuenta anual de las subvenciones que se asignen a los Grupos Parlamentarios se incorporará a la Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, para efectos de las facultades que competen al órgano de fiscalización previsto en el artículo 79 constitucional.
De dicho documento se remitirá un ejemplar a la Contraloría Interna de la Cámara. Esta propuesta se enmarca en la agenda de transparencia y rendición de cuentas adoptada por la bancada de Movimiento Ciudadano para combatir la opacidad en la Cámara de Diputados. La aprobación de bonos extraordinarios entre los legisladores, una práctica común, volvió a presentarse en diciembre pasado cuando el resto de los Grupos Parlamentarios se asignó 180 millones de pesos.
Al exponer las razones de su propuesta, el diputado Álvarez Máynez dijo que en los últimos cuarenta años México ha vivido cambios de enorme significación y relevancia en el sistema político pero no ha habido una transformación en cómo se ejerce el gasto público. ?Con mayor frecuencia de lo que quisiéramos, los recursos públicos son utilizados de manera discrecional e irresponsable para beneficio propio, para generar redes clientelares, o para hacer favores?.
Un ejemplo de ello, citó, es el reparto recurrente en la Cámara de Diputados de subvenciones extraordinarias a los Diputados Federales de manera proporcional al número de integrantes de cada bancada. Estas prácticas sólo han contribuido al desprestigio de la política, de quienes la ejercen, de las instituciones y del sistema político democrático mexicano. ?Hoy tenemos un régimen político democrático y plural de partidos que enfrenta grandes críticas y cuestionamientos y se ubica muy lejos lo que llegó con un gran entusiasmo y en oposición al sistema totalitario, autoritario y oligárquico descrito por Woldenberg como un presidencialismo dotado de enormes facultades constitucionales y meta-constitucionales; partido hegemónico, subordinación de los poderes Legislativo y Judicial al Ejecutivo, federalismo formal, centralismo real, elecciones sin competencia, subordinación de organizaciones, sociales, sindicales y empresariales al poder político?.
Explicó que la llegada de la democracia significó cambios significativos en el sistema político, pero la alternancia no desmontó el régimen de privilegios y excesos de la clase política gobernante. La corrupción y la desigualdad no se fue cuando llegó la alternancia. Según datos de Transparencia Internacional, México es el país más corrupto en prácticamente todos los acuerdos comerciales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
En un rango de 168 países, México ocupa el lugar 95 y el decimoquinto lugar dentro de los países del continente Americano, obteniendo solamente 35 puntos de 100 en el Índice de Percepción de la Corrupción. ?Mientras los políticos de siempre se siguen enriqueciendo hay 36 millones de mexicanos que cuentan con solo $34.00 pesos de ingreso diarios para hacer frente a las carencias. De acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), entre 2008 y 2010 el porcentaje de las personas que no pueden alimentarse de manera conveniente creció de 21.7% a 24.9%?, subrayó. Según datos del Latinobarómetro en México tan sólo 19 de cada 100 personas están satisfechas con la democracia, siendo el país con menor satisfacción de los 18 de América Latina. Sólo el 26% de la población mexicana considera que las elecciones son limpias.
En apoyo a la democracia México obtuvo un 48% situándose por debajo del promedio de la región Latinoamericana. Sólo uno de cada cinco está satisfecho con la democracia y solo el 17% se siente representado por el Congreso. Dijo que pese a la alternancia, las instituciones públicas mexicanas siguieron con su misma inercia, diseñadas para que la estructura de oportunidades favorezca a unos cuantos y deje marginada a la gran mayoría. Tenemos un país ?añadió? donde la mayoría de las grandes fortunas nacionales se han construido a partir de concesiones entregadas por el Gobierno: Carlos Slim (Telmex), Germán Larrea (transporte) y Alberto Bailleres (minas); ninguno de ellos innovó en alguna tecnología, invento un producto o servicio nuevo. Para el diputado Álvarez Máynez, la clase política de este país, como lo llama Ricardo Raphael ?El Mirreynato? solo ha querido hacerse rica los más pronto posible, y los empresarios necesitan comprar políticos para influenciar sobre el Estado. ?Será tal vez por esto que vean natural y normal los Diputados Federales poderse repartir al final de cada año entre ellos ?sobrantes? del presupuesto de egresos, sumas de dinero que van más allá de los 300 mil pesos por cada uno?. ?Nuestro legisladores cumplen la máxima e histórica de la corrupción mexicana, ser jueces y partes.
Facultados por la Constitución para aprobar el presupuesto, deciden abonar a sus cuentas personales cantidades de dinero que millones mexicanos tardarán décadas en poder obtenerla?. Explicó que se trata de una franca violación a la Ley de Egresos de la Federación por parte de quienes se encargan de aprobarla, al repartir dinero del presupuesto que no estaba etiquetado ni destinado en las partidas 3991 ?Asignaciones a los Grupos Parlamentarios? y 4390 ?Otros Subsidios y Subvenciones? del Presupuesto de Egresos de la Federación 2015.
Estas subvenciones extraordinarias, o bonos navideños como algunos lo catalogaron, violan también el artículo 11 de la Norma para Regular la Transferencia y Control de Recursos Financieros Asignados a los Grupos Parlamentarios de la Cámara de Diputados ya que no se argumento ni se especificó la causal de esta asignación como lo establece dicho artículo.
Además de estas violaciones por parte de los legisladores, la Auditoría Superior de la Federación ha señalado en su Informe de Cuenta Pública 2013 que los Diputados no son capaces de soportar las subvenciones que les han sido entregados. "Se gastan el dinero de la gente, el dinero público en la total discrecionalidad y opacidad cuando deberían ser utilizados para su actividad legislativa y no como un sobresueldo a sus casi 75 mil pesos mensuales incumpliendo la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria", insistió el diputado de Movimiento Ciudadano.